La Corte no le aceptó la licencia a Lijo y tendrá que renunciar para ser juez del máximo tribunal
Ariel Lijo, juez del Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Criminal y Correccional Federal Nº4, no renunciará a su puesto y sigue apostando a la aprobación de su pliego por parte del Senado para asumir en la Corte Suprema de Justicia, luego de que hoy jueves la Corte Suprema rechazara por mayoría su pedido de licencia para ocupar el cargo en el máximo tribunal.
La Corte, en su decisión, negó la posibilidad de que Lijo se tomara una licencia de su actual puesto, y las alternativas que le quedan son claras: una es dimitir de su cargo judicial, pero fuentes cercanas al magistrado señalaron que “no va a renunciar”. “El doctor va a esperar la decisión del Senado. Mientras tanto, sigue trabajando en su juzgado y en el que subroga”, indicaron .
La única vía posible ahora es que el Gobierno Nacional consiga la aprobación de su pliego en el Senado, y para ello tendrá que reunir los votos necesarios, algo que no fue posible cuando el caso $LIBRA causó una crisis que obligó a levantar la sesión en el Congreso. Lijo había estado confiado en que tenía los votos para llegar a la Corte, pero el escándalo en torno a la criptomoneda y el escaso apoyo en ese momento de la Cámara Alta complicaron su camino. Finalmente, el presidente Javier Milei lo nombró por decreto.
A pesar del rechazo de su pedido de licencia, el pliego de Lijo sigue teniendo dictamen en la comisión de Acuerdos, por lo que podrá ser tratado en cualquier momento. En caso de que el Senado no lo ratifique antes de fin de año, Lijo regresaría a su puesto original.
El rechazo al pedido de licencia de Lijo fue impulsado por los ministros Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Manuel García-Mansilla, quienes se opusieron a la posibilidad de que el juez se incorporara a la Corte sin abandonar su actual puesto. En la votación, en minoría, Ricardo Lorenzetti se mostró a favor de la incorporación de Lijo a la Corte. El reglamento de la Corte instaura que las decisiones sobre superintendencia se resuelven por mayoría simple, lo que dio como resultado la negativa a su solicitud.
Con la negativa de Lijo a dimitir y el rechazo de su solicitud de licencia, el puesto en la Corte sigue vacante, complicando la resolución de la situación judicial. El caso de Lijo se complica aún más después de la reciente designación de García-Mansilla, también por decreto, que se sumó a la controversia.
Desde el Gobierno, la defensa de la designación de Lijo ha sido firme. El presidente Javier Milei dijo: “Lijo es juez federal, tiene las condiciones de un juez. No solo eso, es especialista en temas de narcotráfico y ciberdelitos, áreas en las que la Corte no tiene especialistas. Es respetado por sus pares”. Además, Milei valoró que Lijo no había recibido revocaciones en sus fallos, apuntando que uno de los casos más conocidos que involucró a Lijo fue el encarcelamiento del ex vicepresidente Amado Boudou.




