Alzheimer: una enfermedad que afecta tanto a pacientes como a cuidadores
En 2015 fueron contabilizadas 503.000 personas con algún tipo de demencia en Argentina, según la Asociación Internacional de Alzheimer, dando cuenta de una alta proporción de personas que necesitan ayuda para desarrollar sus actividades diarias y requieren supervisión durante todo el día.
Algunos especialistas, consideran que no sólo están afectados los pacientes, sino también sus cuidadores, lo que duplica o triplica el número de los llamados "otros enfermos".
En nuestra región, los pacientes suelen ser cuidados en sus domicilios y por sus familiares, amigos o vecinos, debido a los altos costos que implica contratar a un enfermero o profesional médico para concretar los cuidados diarios, además de la carencia de centros especializados en la estimulación y cuidado de estos pacientes.
Este esquema ocasiona niveles altos de sobrecarga en los cuidadores, disfunción familiar y síntomas psíquicos asociados al estrés que implica esa tarea, ya que no están formados ni preparados para esta labor y tipo de convivencia.
El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa, causada por la destrucción progresiva de las neuronas cerebrales que afecta funciones tales como la capacidad para prestar atención, resolver problemas, tomar las decisiones acertadas, seguidos por el deterioro de la memoria, el lenguaje, la percepción, el pensamiento y la conducta, alterando la capacidad de la persona para desenvolverse en forma independiente en sus actividades habituales.
Existen ocho factores principales de riesgo: la edad, el sedentarismo, tabaquismo, la hipertensión, obesidad en la adultez, diabetes, depresión y baja educación formal y/o estímulo sociocultural.
Para conocer más sobre esta enfermedad, MISIONES OPINA entrevistó al neurólogo Emanuel Silva, quien se desempeña profesionalmente en la ciudad de Posadas.
Políticas públicas en materia de Alzheimer
La Asociación Internacional de Alzheimer contabilizó en 2015 unas 503.000 personas con demencia en la Argentina con una incidencia anual de 74.061 nuevos casos en mayores de 65 años, con una frecuencia de la demencia del 12.18%, del tipo Alzheimer de 5.85% y demencia vascular de 3.86 %. Se proyecta que ese número se incrementará a 1.181.000 personas en 2050.
Más de 30 países ya desarrollaron planes o estrategias nacionales para la enfermedad de Alzheimer. En la Argentina, el Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados desarrolló en 2016 el Plan Estratégico Nacional PAMI para un Cerebro Saludable, Enfermedad de Alzheimer y otras Demencias 2016-2019, en el que participaron expertos en demencia de nuestro país.
En Misiones en septiembre de 2018 fue aprobado por la Legislatura provincial el proyecto de ley que establece la creación del Programa Alzheimer Misiones que tiene por objeto promover un sistema integral de salud destinado a la detección temprana, tratamiento y rehabilitación de las personas que padecen esta enfermedad y otros trastornos cognitivos, así como la asistencia y contención de los cuidadores.
A partir de esta ley, pretenden crear Centros Especializados de Estimulación Avanzada en Alzheimer en Posadas, Oberá, Eldorado y Puerto Iguazú.
Entre los objetivos del programa se contempla organizar protocolos de evaluación temprana (screening) que faciliten el diagnóstico y tratamiento precoz; propiciar la rehabilitación cognitiva del paciente a través del uso de la tecnología con equipos de última generación; promover proyectos de investigación; analizar la prevalencia, incidencia, costo y tendencias de la enfermedad a nivel provincial; y arbitrar los medios necesarios para promover el conocimiento en la comunidad por medio de campañas de concientización y divulgación.
Asimismo, capacitar, informar y brindar contención a los familiares y cuidadores de las personas afectadas; optimizar los recursos cognitivos y comunicativos, ofreciendo herramientas que posibiliten el proceso de reconocimiento y valoración de sí mismo; cooperar en la rehabilitación y reeducación funcional de las habilidades perdidas; promover la formación y capacitación de los profesionales de la salud; y coordinar con los establecimientos asistenciales de los subsectores público y privado.
Se deberá brindar cobertura del cien por ciento en la provisión de medicamentos, estudios, diagnósticos y prácticas de atención a las personas comprendidas en el programa.




